Inmunología de las alergias

Por Dra. María Álvarez Montes, Neumología pediátrica/alergias/inmunología 

El sistema inmunológico es el encargado de defendernos de todo tipo de infección, incluyendo bacterias, virus, hongos, parásitos, así como cualquier sustancia nociva. Es responsable de la respuesta alérgica, así como de la respuesta auto inmune. Es un sistema vasto, sumamente potente y específico.  Defectos congénitos en el sistema inmunológico pueden resultar en una capacidad limitada, alterada o ausente para combatir las infecciones.  Esto se conoce como inmunodeficiencias primarias.  Existen más de trescientos tipos de ellas y se continúan identificando. En Puerto Rico contamos con pruebas de cernimiento neonatal (la prueba que se toma del talón de los bebés recién nacidos en Puerto Rico) para algunas de las más severas.

Lo dividimos en cuatro componentes para propósitos de estudio y evaluación. Un componente humoral, que llamamos inmunoglobulinas, son cuatro tipos y se encargan de combatir infección, así como de la respuesta alérgica. El componente celular diferencia mis tejidos, mi identidad celular, de todo aquello que es ajeno a ella, jugando un papel primordial en detectar células, enfermas o mutadas y eliminarlas. Esto ocurre silenciosamente todos los días sin que nos demos cuenta. Combate infecciones por ciertos tipos de organismos.

La tendencia a la atopia (alergias) es hereditaria, es decir, corre en la familia. La misma se puede manifestar de diferentes maneras en cada uno de sus miembros. Comienza bien temprano, tanto como en el periodo neonatal y sus manifestaciones ocurren en un orden específico. Esto se conoce como la marcha alérgica.  Su primera manifestación en recién nacidos es la alergia a la proteína de la leche, la lactosa es un azúcar y no causa alergias, que puede estar asociada a dermatitis atópica. Una tercera parte de los niños que presentan dermatitis, tienen alergia a alimentos. Luego se desarrolla la alergia nasal y de éstos van a desarrollar asma. En los niños el asma es un proceso alérgico. Puede ser provocado por alérgenos del ambiente como, ácaros de polvo, hongos del ambiente, cucarachas y/o alimentos.

Para identificar los causantes, se hacen pruebas de alergia en piel. Las mismas se pueden realizar en niños pequeños e infantes, ya que no utilizamos agujas para aplicarlas. En adición pueden ocurrir alergias a medicamentos, metales, materiales dentales, componentes de los zapatos, al látex y a químicos comunes. Utilizamos piezas de metal y/o plástico para el reemplazo de caderas, rodillas, etc., así como para fijar fracturas o corregir deformidades óseas. Estas alergias se pueden evaluar con diferentes tipos de pruebas.

Los procesos alérgicos son muy comunes en Puerto Rico, debido a nuestro ambiente tropical y localización geográfica, así como a nuestra composición genética. Existen diferentes modalidades de tratamiento que van desde medicamentos sin receta y recetados, biológicos e inmunoterapia. Este último lo conocemos como vacunas de alergias. Son sumamente efectivas para tratar la alergia nasal, el asma alérgica, y alergias a insectos. En Puerto Rico la alergia a picadas de mosquito y hormigas es muy común. Se tratan por este medio las alergias a avispas y abejas también. La inmunoterapia es el único tratamiento que altera la historia natural del asma, causando que esta respuesta alérgica se apague, o disminuya significativamente, controlando las exacerbaciones, evitando visitas a sala de emergencia y hospitalizaciones.  Nos permite disminuir la cantidad, dosis y frecuencia de los medicamentos de control. En algunos pacientes es posible eliminarlos. Si usted o su niño presenta algunos de estos síntomas, amerita una evaluación de alergias.

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