Puerto Rico siempre ha sido una isla repleta de artistas y gente talentosa en todas las facetas del arte, personas que brillan tanto en la isla como alrededor del mundo y que construyen con éxito sus carreras diariamente, con enfoque y dedicación. Este es el caso de nuestro entrevistado, el pintor ponceño Alfredo Bauzá.
El artista ha desarrollado su pasión por la pintura desde los quince años. Eventualmente, Bauzá ingresó en el mundo académico de las artes, obteniendo un Bachillerato en Educación Artística y Artes Gráficas de la Universidad Interamericana de San Germán, y una Maestría en Dibujo y Pintura de la Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico.
Por su talento y su entrega, Bauzá ha podido representar a Puerto Rico a nivel internacional en distintas disciplinas del arte, por lo que ha sido reconocido y premiado en repetidas ocasiones.
Esta revista tuvo el placer de entrevistarle hace seis años. Para nuestros lectores de siempre y nuevos lectores, ¿quién es Alfredo Bauzá hoy día? Alfredo Bauzá es un artista que hace estudios antropológicos y sociales en los espacios que visita, para crear imágenes que deja plasmadas en sus lienzos, imágenes que quedan como testimonio a través de los años que me toque vivir. Además, colaboro en comunidades de arte con artistas de renombre en distintas partes del mundo, por ahora en Chicago, específicamente.
¿Qué le inspiró a vivir de su pasión, el arte, y cómo ha sido su trayectoria? Me inspiró la creación de Dios y la mujer como mayor creación. Mi trayectoria es de más de treinta años y he dejado huellas en Puerto Rico y en las diferentes partes del mundo que he podido visitar.
¿Cómo le sirvió su preparación académica para sobresalir en el mundo de las artes? La preparación académica es un elemento vital para ejercer exitosamente una carrera de artista. Te brinda un conocimiento más amplio de lo que es el mundo del arte.
¿Podría mencionar algunas cosas que haya logrado a través de su carrera que sean causa de orgullo para usted? Me siento orgulloso de muchas cosas, entre ellas haber participado en exposiciones al lado de artistas de gran renombre, lo cual me hace crecer de manera muy positiva como artista. Me puedes poner al lado de Banksy, el grafitero más famoso del mundo, y al lado de Andy Warhol, el artista pop más importante del siglo veinte. Tuve la oportunidad de participar en una muestra que se tituló Art is Money, Money is Art y para mí fue muy especial haber expuesto mi talento al lado del artista Banksy. En el 2002, tuve la oportunidad de ir al Congreso de Marbella España. Asimismo, en el 2018 fui escogido como Pintor Ponceño del Año. También, otro gran logro fue haber recibido un galardón en Chicago como artista invitado a la comunidad Workshop 4200. Me hace muy feliz poseer patrimonios nacionales en Puerto Rico, como en la alcaldía de Ponce, e internacionales, como en la alcaldía City Hall Delaware.
¿Entre sus piezas, hay alguna que sea su favorita? Sí, tengo una. Se llama Behind Memories Lincoln. Es mi pieza favorita porque tuve mucha libertad en el proceso. La obra plasma un estilo mío bastante distinto.
¿Cómo cree que ha evolucionado la carrera del arte en Puerto Rico, y qué opina sobre su exposición en el mundo? Lamentablemente, el arte nunca ha sido protagónico en Puerto Rico; es un país con pocas aspiraciones para el arte. Tristemente, he tenido que trotar por el mundo, obligado a brincar el charco y exponerme en cada lugar que voy para darme a conocer, lo que me ha llevado a obtener éxito y reconocimiento, tanto social como institucional. En Puerto Rico tengo mecenas y coleccionistas que son los que sostienen mi carrera internacional, conjunto con los auspiciadores. En estos momentos estoy siendo auspiciado por la tienda Blick Art de Chicago, lo cual me llena de orgullo, porque es una de las mejores tiendas de arte. Espero que algún día se reconozca el valor de esta importante rama y le den mayor exposición a los nuevos talentos que vienen surgiendo.
¿Tiene alguna anécdota que haya marcado su vida para bien? Algo que inspire a artistas que quieran lograr lo que usted ha logrado. En una ocasión, estando fuera de Puerto Rico, perdí dinero y me quedé sin comprar materiales. Estuve indeciso entre comprar comida o materiales para pintar, situación que me llevó a utilizar los empaques de la comida para hacer arte. Esto me dio una gran lección; no hay excusa para no hacer arte, es una actitud que se asume. Espero que esto le sirva de inspiración a los jóvenes que tienen ganas de ser como yo, o incluso mejor que yo.
¿Siente usted que ha conseguido lograr un balance entre su vida profesional y su vida personal? He encontrado un balance en mi vida. He tenido la oportunidad de combinar el deporte y el arte, lo cual es una mezcla poderosa que me hace sentir bien. Utilizo el tenis de mesa para ejercitarme, y tengo otros hobbies como el kayac y la bicicleta que también me ayudan a ser más efectivo y eficiente en el proceso creativo de mi trabajo. También, esto me permite establecer un buen ritmo en los movimientos corporales, ya que mis obras requieren de movimiento y fuerza. Por ende, mi balance es entre una buena alimentación, una rutina de ejercicios y un buen ritmo al trabajar en el proceso creativo del arte.
¿Qué podemos esperar de Alfredo Bauzá en el 2020? En mi ámbito de artista pueden esperar una nueva obra que estaré presentando en Ponce, Puerto Rico, titulada Bauzá, Vida y Obra: Tres Décadas de Trayectoria. Esta será presentada en el espacio de arte Bauzá, ubicado en el Edificio MCS Plaza, y en la Rambla Tower. Son muchas obras, así que se harán en esos dos espacios, posiblemente en enero 2020.